Desde Pucusana, Perú, la Hermana Concepción, Sierva del Evangelio, agradece a los niños, que este año han recibido la Primera Comunión, en la Parroquia de San Vicente su generosidad, para con los niños que ellas cuidan en el Colegio de San José.
Lo hizo mandando una carta al Párroco que se leyó a los niños y sus familias el pasado domingo en la Eucaristía. Esta es la carta, en la que entre otras muchas cosas, pide a los niños que sean siempre amigos de Jesus, y que esa amistad sea el motor que les mueva a compartir con los más pobres
D. Fernando
Gutiérrez Santa maría,
Párroco de San
Vicente, Ávila
Estimado en el Señor: Un año más
tengo la oportunidad de dirigirme a usted y en su nombre a toda esa querida
Parroquia de San Vicente, donde tuve la suerte de trabajar durante algunos
años. Agradezco muchísimo que año tras año sigan acordándose de nuestros niños
del Colegio de San José ubicado en Pucusana, Perú.
Nuestra labor
con estos niños y sus familias es de ayuda social, ya que son hijos de
pescadores la mayoría, trabajo duro y mal retribuido; también podría decir que
son familias desestructuradas, niños que viven con padrastro o madrastra u
otros familiares, sin el calor del hogar, madres solteras con hijos cada uno de un padre, padres
drogadictos que dejan en sus hijos secuelas
para toda la vida. En el colegio tratamos de aliviar y solucionar los
problemas que se pueden, a través de psicólogos, sacerdotes, y otras personas
dedicadas a este tipo de problemas. También tenemos encuentros de formación
cristiana y otras actividades culturales para lograr que haya en el colegio un
ambiente de familia donde los niños puedan crecer sanos en cuerpo y alma.
Como
centro de esta ayuda social tenemos el comedor, donde se les da desayuno y
comida diaria, intentando que salgan a sus casas bien alimentados y para que
puedan rendir en la enseñanza que se les imparte. A medida que pasan los días
se les ve crecer y ponerse fuertes.
Todo esto lo podemos llevar adelante, gracias
a las ayudas que recibimos de tantas personas, como ustedes, que todavía son
capaces de renunciar a cosas menos necesarias en favor de otros más necesitados.
Llevamos 20 años manteniendo esta obra y confiamos que la Divina Providencia no
nos abandonará.
En
nombre de nuestros niños, de sus familias y de la comunidad un gracias muy
grande a usted y a todas las personas que quieren colaborar. Que Dios bendiga a todos y de manera muy especial a ese grupo de niños
que han recibido su Primera Comunión y que Jesús y que Jesús sea siempre su
mejor Amigo y el motor que les mueva a compartir con los más pobres.
De nuevo
gracias de parte de la comunidad de Siervas
del Evangelio, de los niños y de las familias.