Un grupo de alumnas de enfermería de la Universidad Católica de Ávila, encabezadas por una de sus profesoras, formarán parte de un grupo misionero que trabajará en Yerbateros y Nocheto (Lima, Perú) durante la primera quincena de agosto.
Inma, una de las responsables del grupo, nos cuenta en qué consisten las misiones que llevarán a cabo esos días.
Las misiones tendrán lugar la primera quincena de Agosto y se llevarán a cabo en dos de las zonas mas pobres de Lima (Perú): Yerbateros (donde se trabaja desde hace varios años) y Nocheto (donde es el primer año que se va). En esta segunda zona se comenzó el trabajo porque el sacerdote de ahí se enteró de la gran labor que hacía este grupo de misiones al que nosotras nos unimos y le pidió a la responsable que también fuesen a su zona.
De España viajamos un total de 9 chicas que nos unimos al grupo de Misiones de la Universidad Católica de Perú.
Las actividades que realizaremos serán muy diversas. Por las mañanas iremos a colegios y trabajaremos con niños de 3 a 15 años (más o menos). Dependiendo de la edad, las actividades serán diferentes. Para los más pequeños haremos juegos, con los de primaria daremos apoyo escolar de las diferentes materias y para los de secundaria trataremos valores humanos: caridad, voluntad, respeto,...
Este año, por primera vez, podremos contar con una posta médica diaria (antes sólo se hacía una vez en los 15 días), ya que de España vamos un gran número de estudiantes de enfermería y medicina, así como una doctora y enfermera ya tituladas. Es por eso nuestra "recolecta" de medicamentos, leche infantil, pañales,...
Tanto en las actividades del colegio como en las de la posta médica se irán turnando los misioneros para que en ningún momento, ninguna de las dos cosas quede desatendida.
Por las tardes se realiza el llamado "casa por casa" que, como su nombre indica, se trata de ir por las casas hablando con las familias, viendo que problemas tienen, intentando ayudarles dentro de nuestras posibilidades. Nos presentamos como misioneros católicos, por lo que solemos terminar nuestras visitas rezando con ellos, pero siempre nos encontramos con gente que no cree o que pertenecen a otras religiones. En estos casos, nuestra tarea es la misma, pero no terminamos con una oración, ya que vamos a ayudar, no a imponer. Aunque en nuestras oraciones en solitario siempre están presentes todos.
Aquí también aprovechamos para hacer visitas médicas, ya que muchas personas son mayores y no pueden ir hasta la consulta.
También hay días en los que hacemos "obra social" que, por así decirlo, es el trabajo "físico": hacemos escaleras en el cerro, pintamos fachadas, asfaltamos calles,... En definitiva, todo aquello en lo que podamos prestar ayuda.
Mientras todo esto se lleva a cabo, hay misioneros encargados de preparar para el bautismo, ya que hay mucha gente (desde los mas pequeños hasta los mas mayores) que nos han recibido este Sacramento.
Es muy bonito ver como el último día (es cuando se realizan los bautizos) la Iglesia se llena de gente que recibirá el agua bautismal. Además, los misioneros tenemos la oportunidad de ser padrinos de muchos de ellos. Yo, por ejemplo, soy madrina de 3 hermanos.
Otra actividad es el trabajo con jóvenes catequistas. Tenemos juegos, charlas y un día llevamos a cabo una jornada deportiva. Ves que son jóvenes con las mismas inquietudes que nosotros que lo único que quieren es alguien que crea en ellos.
Todo esto lo hacemos en colaboración con los párroco de ahí. Uno de ellos es el Padre Arturo, el cual nos presta todas las instalaciones de la parroquia para pasar esos 15 días.
Hay veces en que la ayuda puede resultar mas espectacular o puede que sea mas visible, pero lo que mas llena es el hecho de ayudar. Ver como acompañar o simplemente dar la mano a alguien, llena de paz a la persona. Es cierto eso que dicen de que una mirada, una sonrisa lo paga todo.
