En
una misma jornada celebramos dos cosas distintas pero muy próximas, la oración
por las vocaciones de especial consagración y el cuidado por las vocaciones nativas
en países de misión. El objetivo de este día es promover la oración por las
vocaciones de especial consagración, fomentar entre los jóvenes las
disposiciones necesarias para poder escuchar la llamada y responder a ella,
impulsar la colaboración con la Obra Pontificia de San Pedro Apóstol para que
las vocaciones de territorios de misión puedan contar con recursos para su
formación y sostenimiento.
Hoy
día es difícil para un joven poder escuchar la llamada del Señor, aquí y en
cualquier país del mundo, el ruido es demasiado. Por eso el lema invita a tomar
conciencia de que es necesario escuchar más hondo. El Papa Francisco nos dice,
en el mensaje para esta jornada, que hemos de cuidar tres cosas para promover
las vocaciones de especial consagración:
-
Escuchar: es necesario descubrir la llamada especial y personal que Dios ha
pensado para nosotros.
-
Discernir: Todo cristiano debería desarrollar la capacidad de leer desde dentro
la vida e intuir hacia dónde y qué es lo que le pide para ser continuador de su
misión.
-
Vivir: No podemos esperar a ser perfectos para responder, la vocación es hoy,
la misión cristiana es para el presente.
Esta
jornada, como ya hemos dicho, nos invita ante todo a orar por las vocaciones.
Pero no olvidemos también las necesidades materiales que tienen los seminarios
y noviciados en países de misión para poder llevar a cabo la formación de
chicos y chicas, por eso esta jornada también quiere concienciarnos de las
diversas maneras como podemos ayudar a esas realidades. En la revista Iluminare
encontraréis toda la información sobre posibilidad de becas, estipendios de
misas, etc, con las que poder ayudar.
En
el marco de esta Jornada Mundial de Oración por la Vocaciones y Vocaciones
Nativas tendremos la suerte en nuestra Diócesis de contar con un nuevo
sacerdote, ya que ese día será ordenado Nicolás Ruiz, en la Catedral a las
18:00h. Damos gracias a Dios por el don de un nuevo sacerdote para nuestro
presbiterio, y esperamos que sea siembra de nuevas vocaciones.
Deseándonos
una buena una Feliz Pascua de
Resurrección, recibid un cordial y fraternal saludo.
Amador
Gutiérrez Raúl
García
Obras
Misionales Pontificias Pastoral
Vocacional
